Los populares critican que el PSOE de Alcalá, con su alcalde a la cabeza, votara en contra de pedir que se retire la modificación del delito de sedición

El Partido Popular de Alcalá de Henares lamentó el voto en contra del PSOE ante la propuesta que los populares complutenses llevaron a pleno para que el Ayuntamiento de Alcalá mostrara su rechazo a la iniciativa de modificación del Código Penal que supone derogar el delito de sedición presentada por el Gobierno de la Nación.

“El alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez, que aplaude a Pedro Sánchez en los actos del PSOE, se ha convertido también en su cómplice con su silencio y con su voto en contra de nuestra moción para frenar las tropelías del Gobierno. Mientras otros socialistas lo critican abiertamente como Alfonso Guerra o Emiliano García Page, el PSOE de Javier Rodríguez se alinea con Pedro Sánchez y calla ante la desastrosa deriva que el Sanchismo está llevando a nuestro país”, afirma la portavoz municipal Judith Piquet.

La líder del PP complutense asegura que “es importante que los alcalaínos sepan qué piensan sus dirigentes sobre estas decisiones, si están a favor o en contra de esta deriva adoptada por el Gobierno de España que pretende rebajar las penas de sedición y malversación”. “Hasta ahora, el mismo alcalde que no para de confrontar con la Comunidad de Madrid, calla de una manera cómplice ante las decisiones del Gobierno de Pedro Sánchez, el peor presidente del Gobierno de España en el peor momento”, indica Piquet.

Desde el PP recuerdan que Javier Rodríguez forma parte de los órganos de dirección de este PSOE de Pedro Sánchez. En concreto, en la Comisión de Ética y Garantías de un PSOE, que por cierto ha anunciado recientemente la expulsión de Joaquín Leguina, expresidente socialista de la Comunidad de Madrid.

“Creíamos que era necesario un pronunciamiento explícito manifestando el rechazo a cualquier acción que suponga debilitar al Estado. Desde estas instituciones que forman parte del Estado se debe llevar a cabo una defensa a ultranza del principio de que todos somos iguales ante la Ley. Ni Pedro Sánchez es digno de la tradición democrática del PSOE ni el PSOE puede callar ante este episodio sin ser cómplice expreso de esta barbaridad política. El silencio del alcalde y de otros dirigentes suponen una traición a los valores que un día decidieron representar y a los electores que votaron por ellos”, indican.

Judith Piquet explicó durante el pleno que “las leyes de España no pueden redactarse en la sede de ERC ni por la conveniencia política de Pedro Sánchez. Ni la Constitución ni el Estado de Derecho pueden rendirse a las necesidades de ningún dirigente político y menos a las de aquellos que se levantaron contra nuestra Nación. En ningún país europeo se reformaría el delito de sedición por parte de los sediciosos”.

En su opinión, el Gobierno de España retoma un peligroso precedente; el de ceder de manera constante y permanente a las pretensiones más radicales de sus socios parlamentarios, aunque con ello no solo socaven los principios y fundamentos del Estado de Derecho, sino que pongan claramente en cuestión la independencia del poder judicial al volver a corregir las sentencias del Tribunal Supremo y en la politización de la justicia al admitir que sean los políticos condenados por sedición quienes modifican las penas de los delitos que han cometido.

“Dicho de otra manera, de llevarse a cabo esta reforma, el gobierno de España estaría participando activamente en el descrédito y el menoscabo de dos instituciones fundamentales del Estado, como son las Cortes Generales y los tribunales de Justicia, beneficiando política y judicialmente a quienes en su día trataron de atentar contra la integridad territorial y el orden constitucional de España”, concluye.

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